lunes, 18 de octubre de 2010

River empató por cuarto partido seguido

Por Verónica Drygailo

El empate dejó una sensación extraña… River lo pudo ganar con la polémica jugada de Funes Mori en el final, aunque estuvo cerca de perderlo cuando Godoy Cruz se le fue encima en los últimos minutos. Lo cierto es que se sumó un punto, ante un rival complicado y en condición de visitante. El 2 a 2 pareció ajustarse a lo que mostraron los protagonistas de ambos lados. Futbolísticamente, el balance del juego desarrollado por los dirigidos por Angel Cappa también resultó ambiguo. El “Millo” evidenció evolución en algunos aspectos e involución, en otros.

Por un lado, el entrenador eligió un mediocampo con mayor recuperación de pelota con Affranchino y Pereyra rodeando a Acevedo y optó por Lamela como generador de juego, dejando a Ortega en el banco. Además, se decidió por sacar a Funes Mori, quien venía “peleado” con el arco y lo puso desde el arranque a Caruso junto a Pavone. A priori, el esquema parecía el más adecuado para enfrentar a un rival que basa su juego en la circulación del balón. River no pasó demasiados sobresaltos en el primer tiempo y a los 40, Pereyra le puso un pase justo a Pavone, el remate del “Tanque” pegó en el palo izquierdo de Torrico y Sigali, que llegaba corriendo para despejar, la terminó metiendo en su propio arco. Los de Cappa se fueron con la ventaja al descanso. El DT ya había mandado a Ortega a prepararse para ingresar antes del gol y en el comienzo de la segunda parte, el “Burrito” reemplazó a Pereyra. Según parece, el “Tucu” tenía una contractura. Entonces, el jujeño pasó a moverse como armador y Lamela se corrió a la izquierda. Otra vez, el equipo quedó desequilibrado en la mitad. El “Tomba” demoró siete minutos en aprovecharse de la situación. Luego de un tiro de esquina a favor, River quedó mal parado y se escapó David Ramírez, quien se encargó de marcar el 1 a 1. En los relevos, también se hace evidente la ausencia de Almeyda.

El “Millo” decidió cambiar golpe por golpe, con desorden y su inquebrantable voluntad, el equipo de Angel Cappa fue a buscar el triunfo. Pavone y Ortega se sacrificaban para dar una mano en la recuperación y justo, de una excelente “bocha” del “Burrito” para el “Tanque” se consiguió el 2 a 1. Iban 18 minutos. El técnico se dio cuenta de que sus dirigidos perdían en la mitad y determinó el ingreso de Ballón por Lamela, quien quedó lesionado por la “plancha” de Curbelo. Sin embargo, las piezas no se ordenaron correctamente y el “Turco” Asad también “movió” las fichas. La cancha se inclinó a favor de Godoy Cruz.

Poco a poco, el local se adueñó de la pelota y arrinconó al “Millo” contra Carrizo. A los 33, Ramírez se le escapó a Acevedo y le puso un pase perfecto a Carranza, quien entró por el “corazón” de la defensa “millonaria”, entre Ferrari y Román y decretó el 2 a 2. Cappa “redobló” la apuesta y lo mandó a Funes Mori en lugar de Caruso. River nunca recuperó el orden del primer tiempo. El “Tomba” le “desnudó” falencias defensivas como pocos rivales lo hicieron. El final se hizo de ida y vuelta porque Ortega sacó otro pase de la “galera” para Funes Mori, que la paró con el pecho, pero como su brazo izquierdo estaba extendido, Federico Beligoy anuló la jugada, que terminaba con un golazo del “Melli” clavándola en el ángulo izquierdo de Torrico. Otra vez, Cappa se desbordó. Lo traicionaron los nervios. Repartió insultos para todos lados y se fue al vestuario. Protestaban todos y Ferrero, que estaba entre los suplentes, se ligó la amarilla. Un punto para sumar en la pelea por los promedios, dos para lamentar en la ilusión del título y demasiados interrogantes futbolísticos para River, cuando ya pasó la mitad del campeonato.

1 comentario:

  1. Es así. Se cumple lo que varios previmos y comentamos, por ejemplo en este blog, sobre todo desde el último partido. Para resumir: la defensa andaba bien, ahora anda mal. Solución (tal vez) que vuelva Ferrero por Román. El paraguayo, insisto, no tiene categoría para River, ni está para un momento como este, no importa si cabecea bien o no. Los delanteros no son mejores ni peores que los de los otros equipos; Silva sólo está de racha, como lo estuvieron Silvera, que ahora no hace ni un gol. El grave problema está en nuestro mediocampo; como ya dije, faltan un ocho, Almeyda (o alguien de su categoría) y un diez de relevancia. Entiendo que se hizo lo posible por Bertolo y por Sosa, y por Bolatti; y no se pudo. Con lo que hay alcanza sólo para esto. Cappa no tiene la culpa; se le presentó una oportunidad única, y la tomó; luego algunos que esperaba no vinieron, y a poner el pecho. Pero esto hay que decirlo: River es perjudicado abiertamente por los árbitros; y esto no es de ahora. Creo que después de lo de Banfield y hoy, tendría que haber una movida formal, no sólo de los dirigentes, sino, además, de los periodistas partidarios, y del público millonario. Si no se reacciona, corremos peligro, no "de irnos" sino de que "nos manden" a la B.

    Saludos cordiales.

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